domingo, 27 de junio de 2010


Me hubiese gustado seguir siendo una niña; ausente de todo, sin nigun compromiso. Entonces la vida era mía, la tristeza no dolía, la sonrisa en un pequeño es el pan de cada día. Me hubiese gustado quedarme en un niño para el adulto, pero no haber crecido. Cuando era niña nada se me complicaba, pensaba distinto, era distinta. La vida no me cuestionaba. Cuando era niña nada me atemorizaba; una caida era rutina, dolía, pero me levantaba

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